Esperanza: La Municipalidad compró el Palacio Stoessel.
Esperanza 31 julio, 2013El Departamento Ejecutivo Municipal encabezado por la intendente Ana María Meiners, junto a la familia propietaria del Palacio Stoessel, con la presencia del Escribano Eduardo Cursack (h), procedieron a rubricar el boleto de compraventa del histórico inmueble, valuado en $1.280.000. De esta manera, el Estado municipal recupera para todos los esperancinos un notable patrimonio histórico, arquitectónico y cultural, ubicado en la esquina céntrica de las calles Belgrano y Lehmann.
La compra del inmueble -autorizada oportunamente por el Concejo Municipal de la ciudad utilizando como herramienta financiera para la operación los Fondos de Obras Menores 2012- se concreta finalmente con recursos propios de Rentas Generales hasta tanto la provincia pueda enviar estos dineros adeudados, en el entendimiento que seguir dilatando la compra diluía la efectiva posibilidad de compra del histórico edificio.
Fruto de la impronta del histórico gran desarrollo urbano de la ciudad se construyó poco después de 1885 el Palacio Stoessel, que se caracteriza por ser el único, en Esperanza, que posee techo con mansarda de pizarras. Perteneció a Juan Stoessel y su familia, quien junto a Carlos Bosh fundaron el molino Angelita. El Sr. Stoessel también participó en la Empresa de Colonización de Guillermo Lehmann, dedicándose a la venta de tierras a colonizar.
Está ubicado en la esquina céntrica de las calles Belgrano y Lehmann. Conocido también como la casona “de los Bertotti”, fue construido en 1886 por Juan Stoessel, empresario asociado a Guillermo Lehmann y a Carlos Bosch, con quien fundó el Molino Bosch Stoessel, luego denominado Molino Angelita. El solar, vendido al Banco de la Nación Argentina, fue sede del mismo hasta 1923. Subastado, fue adquirido en 1926 por Marcos Bertotti.
En las dependencias de la planta baja, que dan sobre la esquina, instaló su estudio fotográfico Fernando Paillet y en las dependencias familiares funcionó el primer sanatorio en Esperanza. El estilo predominante es ecléctico. Se destacan su mansarda, techos de tejas francesas, columnas de mármol y detalles de herrería artesanal. Fue uno de los primeros palacios y casas de estilo que se construyeron en la colonia, cuando alrededor sólo se levantaban ranchos y viviendas precarias.